Ethan Nordean, uno de los líderes del grupo, fue condenado a 18 años de prisión, menos de lo que pedían los fiscales. Nordean había sido declarado culpable de conspiración sediciosa y otros delitos.

«Si no tenemos un traspaso pacífico del poder en este país, no tenemos nada», dijo el juez de distrito Timothy Kelly.

En una declaración ante el juez, Nordean calificó el 6 de enero de «tragedia total y absoluta», y dijo que había ido al Capitolio para ser un líder y mantener a la gente alejada de los problemas.

«Si bien es cierto que lamento de todo corazón lo que hice ese día, lo que lamento más es no haber sido un mejor líder», dijo.

El abogado de Nordean, Nick Smith, había pedido una condena de entre 15 y 21 meses.

Antes, Dominic Pezzola, otro miembro de los Proud Boys, gritó «Trump ganó» al salir del tribunal, tras ser condenado a diez años de prisión por participar en el asalto al Capitolio de Estados Unidos del 6 de enero de 2021.

Pezzola no desempeñó un papel de liderazgo en el grupo y fue el único acusado de cinco que fue absuelto de conspiración sediciosa, pero fue condenado por otros delitos graves, entre ellos obstrucción de un procedimiento oficial y agresión a la policía.

Kelly había ordenado el jueves que otros dos antiguos líderes de los Proud Boys, Joseph Biggs y Zachary Rehl, cumplan 17 y 15 años de prisión, respectivamente.

Miles de seguidores de Trump atacaron el Capitolio tras un discurso en el que el republicano afirmó falsamente que su derrota en las elecciones de noviembre de 2020 fue el resultado de un fraude generalizado. Trump continúa haciendo esas afirmaciones falsas.